La jalea es una conserva de fruta que se prepara cociendo fruta fresca o congelada con azúcar y pectina, un gelificante natural que se encuentra en muchas frutas. La mezcla se hierve hasta que el azúcar se disuelve y las frutas se ablandan, y la pectina se activa para formar una consistencia espesa y pegajosa, que luego se coloca en tarros de cristal para que se enfríe y solidifique. La gelatina suele utilizarse como acompañamiento de tostadas, pasteles y galletas, o como ingrediente en postres y recetas de cocina.
Existen muchos tipos diferentes de jaleas, entre ellos:
Jalea de frutas: elaborada con frutas enteras o pulpa de fruta.
Jalea de mermelada: elaborada con membrillos y azúcar.
Jalea de guayaba: hecha con guayabas y azúcar.
Jalea de pimiento: elaborada con pimientos y azúcar.
Jalea de fresa: elaborada con fresas y azúcar.
Jalea de uva: elaborada con uvas y azúcar.
Mermelada de naranja: elaborada con naranjas y azúcar.
Mermelada de moras: elaborada con moras y azúcar.
Mermelada de higos: elaborada con higos y azúcar.
Mermelada de albaricoque: elaborada con albaricoques y azúcar.
Estos son sólo algunos ejemplos comunes de tipos de mermeladas. Hay muchas otras variaciones y combinaciones posibles, en función de los ingredientes y la receta utilizados.